La diabetes es la segunda causa de muerte en México. Y aunque está relacionada con el sobrepeso y la obesidad en adultos, también mata a los jóvenes.
Tal fue el caso reciente de la futbolista del Club América, Diana González de apenas 26 años de edad, quien falleció por una descompensación de la glucosa. Padecía diabetes.
¿Qué es la diabetes juvenil?
De acuerdo con el portal de noticias estadounidense medlineplus.gov, la «hay dos tipos principales de diabetes: la diabetes tipo 1 y la diabetes tipo 2. Ambas hacen que la concentración de azúcar en sangre sea más alta de lo normal, pero lo hacen de distintas formas».
Y agrega: «Hasta hace poco, la diabetes más común en niños y adolescentes era la tipo 1 conocida también como diabetes juvenil. En este tipo de diabetes, el páncreas no produce insulina, que es una hormona que ayuda a que la glucosa entre en las células para darles energía. Sin insulina, demasiada azúcar queda en la sangre».
Otros portales especializados en salud, siguen considerando la diabetes tipo 1, como la diabetes juvenil, pues la continúan viendo como la más común en esta población.
Qué provoca la diabetes en jóvenes
Según explica el National Institute of Diabetes and Digestive and Kidney Diseases sobre la diabetes en jóvenes, «los científicos piensan que la diabetes tipo 1 es causada por genes y factores ambientales, como los virus, que pueden desencadenar la enfermedad. Algunos estudios como el TrialNet están enfocados en identificar las causas de la diabetes tipo 1 y las posibles maneras de prevenir o retrasar el progreso o comienzo de la enfermedad».
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Prevención de la diabetes en jóvenes y niños
De acuerdo con el portal kidshealth.org, «la diabetes tipo 1 no se puede prevenir, y no hay forma alguna de predecir quién la va a desarrollar. No hay nada que un padre o un niño hayan podido hacer que pueda causar esta enfermedad».
«Una vez que una persona contrae una diabetes tipo 1, esta enfermedad no desaparece y requiere tratamiento de por vida. Los niños y adolescentes con una diabetes tipo 1 dependen de inyecciones de insulina diarias o de una bomba de insulina para controlar las concentraciones de glucosa en sangre».